Mientras muchos países recién están desplegando redes 4G LTE o se enfrascan en discusiones por espectros sin avanzar, en otros dan pasos gigantes para ofrecer mejor calidad de vida a través de nuevas redes de comunicaciones.
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En esa línea las empresas IBM y Ericsson han anunciado un acuerdo de colaboración para investigar conjuntamente un diseño de antena para 5G, que permitirá que las redes ofrezcan a sus clientes velocidades de datos mucho mayores a las que ya existen.
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Además no es menor el desafío que imponen los fabricantes de smartphones, cada vez más poderosos, más rápidos y que demandan más velocidad para comunicarse y transmitir datos.
Otro punto adicional son las aplicaciones y las tecnologías inalámbricas M2M que cada vez abarcan más ámbitos de la sociedad y los operadores serán más conscientes del rápido crecimiento de la demanda de datos y de ancho de banda.
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La misma firma sueca a través de su Ericsson Mobility Report, de junio pasado aseguraba que para el año 2019 habría 10 veces más volumen de tráfico de datos móviles.
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Tanto Ericsson e IBM se han adelantado a lo que viene y es por ello que han decidido investigar tecnologías para antenas que desarrollen sistemas prototipo que puedan prestar servicios a más usuarios móviles.
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Estos nuevos servicios ofrecerán velocidades de datos mucho mayores que las existentes actualmente, compitiendo de esta forma con las velocidades de acceso a Internet inalámbricas y desde accesos fijos.
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El resultado de estos avances tecnológicos permitirá integrar cientos de antenas y accesos radio en un único chip más pequeño que una tarjeta de crédito, facilitando el uso de estas tecnologías en pequeñas celdas de alta capacidad en el exterior de edificios y en áreas metropolitanas con alta densidad de población.
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Además ya no habrán daños estéticos al entorno donde viven grandes cantidades de habitantes y habrá un paisaje más limpio.
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Fuente: transmedia
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En esa línea las empresas IBM y Ericsson han anunciado un acuerdo de colaboración para investigar conjuntamente un diseño de antena para 5G, que permitirá que las redes ofrezcan a sus clientes velocidades de datos mucho mayores a las que ya existen.
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Además no es menor el desafío que imponen los fabricantes de smartphones, cada vez más poderosos, más rápidos y que demandan más velocidad para comunicarse y transmitir datos.
Otro punto adicional son las aplicaciones y las tecnologías inalámbricas M2M que cada vez abarcan más ámbitos de la sociedad y los operadores serán más conscientes del rápido crecimiento de la demanda de datos y de ancho de banda.
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La misma firma sueca a través de su Ericsson Mobility Report, de junio pasado aseguraba que para el año 2019 habría 10 veces más volumen de tráfico de datos móviles.
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Tanto Ericsson e IBM se han adelantado a lo que viene y es por ello que han decidido investigar tecnologías para antenas que desarrollen sistemas prototipo que puedan prestar servicios a más usuarios móviles.
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Estos nuevos servicios ofrecerán velocidades de datos mucho mayores que las existentes actualmente, compitiendo de esta forma con las velocidades de acceso a Internet inalámbricas y desde accesos fijos.
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El resultado de estos avances tecnológicos permitirá integrar cientos de antenas y accesos radio en un único chip más pequeño que una tarjeta de crédito, facilitando el uso de estas tecnologías en pequeñas celdas de alta capacidad en el exterior de edificios y en áreas metropolitanas con alta densidad de población.
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Además ya no habrán daños estéticos al entorno donde viven grandes cantidades de habitantes y habrá un paisaje más limpio.
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Fuente: transmedia