Demandantes acusan a la firma de suplantar sus identidades para conseguir nuevos miembros
La respetada red social para profesionales está por estos días envuelta -otra vez- en una grave acusación. En una corte de San Jose, California, se impuso una demanda colectiva contra LinkedIn por -supuestamente-acceder sin autorización a las cuentas de correo electrónico de sus propios usuarios.
La acusación sugiere que el crecimiento de la red social se debe al uso de las identidades de sus propios usuarios para promocionar LinkedIn entre la gente que no tiene participación en el sitio. ¿Y cómo exactamente? Cuando un usuario deja su cuenta abierta, LinkedIn puede acceder a su correo -el nombre de usuario en LinkedIn es justamente esa dirección de correo- sin la necesidad de una contraseña - el supuesto hackeo- y descargar la lista de contactos de una persona. La demanda colectiva busca que compañía devuelva todo el dinero conseguido gracias al robo de identidad.
Sin embargo, en LinkedIn se desmarcan totalmente del asunto (como no podía ser de otra forma). En un mensaje en el blog oficial de la compañía, Blake Lawit asegura que todas las acusaciones son falsas: no hubo acceso no permitido a los correos de la gente, ni tampoco enviaron invitaciones a LinkedIn a nadie a menos que los mismos usuarios lo permitieran.
Por considerar que se trata de una acusación “sin ningún mérito”, la compañía se defenderá con toda su caballería legal hasta llegar a las últimas consecuencias.
FUENTE: FayerWayer
La respetada red social para profesionales está por estos días envuelta -otra vez- en una grave acusación. En una corte de San Jose, California, se impuso una demanda colectiva contra LinkedIn por -supuestamente-acceder sin autorización a las cuentas de correo electrónico de sus propios usuarios.
La acusación sugiere que el crecimiento de la red social se debe al uso de las identidades de sus propios usuarios para promocionar LinkedIn entre la gente que no tiene participación en el sitio. ¿Y cómo exactamente? Cuando un usuario deja su cuenta abierta, LinkedIn puede acceder a su correo -el nombre de usuario en LinkedIn es justamente esa dirección de correo- sin la necesidad de una contraseña - el supuesto hackeo- y descargar la lista de contactos de una persona. La demanda colectiva busca que compañía devuelva todo el dinero conseguido gracias al robo de identidad.
Sin embargo, en LinkedIn se desmarcan totalmente del asunto (como no podía ser de otra forma). En un mensaje en el blog oficial de la compañía, Blake Lawit asegura que todas las acusaciones son falsas: no hubo acceso no permitido a los correos de la gente, ni tampoco enviaron invitaciones a LinkedIn a nadie a menos que los mismos usuarios lo permitieran.
Por considerar que se trata de una acusación “sin ningún mérito”, la compañía se defenderá con toda su caballería legal hasta llegar a las últimas consecuencias.
FUENTE: FayerWayer